Cris siempre me proyectaba su amor para los demás, su dedicación caritativa. Regalaba tanto cariño a las personas necesitadas, recuerdo especialmente todo el cariño que le ha dado a mis dos abuelas, "abuelas" tambien para ella, así las llamaba y con todo el amor.
Empiezo por la materna, Maricarmen o Maruja, (más mayor y que ha fallecido en febrero de 2014), compartía con ella largas charlas de compresión, de búsqueda de "soluciones" a los problemas que una anciana un tanto caprichosa como mi querida abuela planteaba de la vida diaria. Pasaba largas charlas telefónicas y cuando la visitabamos en su casa de Freán yo me iba a leer o pasear, y como de costumbre no solo con mi abuela, Cristina se quedaba charlando con nuestra abuela, era Cris quien daba el cariño era ella quien movía los cimientos de nuestro matrimonio, de verdad de que todo lo bueno que podíamos proyectar era fruto de su inmenso corazón. A mi me echaba tremendas broncas por mi pasividad a la hora de mostrar cariño, recuerdo una vez, ya con mi abuela tocada por el cancer que finalmente le provocó la muerte, veníamos de la comer en el Restaurante "Lucus" de Chantada y pasando mismo el puente sobre el Miño tuvimos que parar por la diarrea que le entrara a la abuela, y Cris no solo daba la caridad de palabra, paramos el coche en un lugar que debiera ser la carretera vieja con suficiente sitio para acompañar a mi abuela a defecar, ayudarla y limpiarla con todo el cariño que todos los que conoceis a Cris sabeis como podía ser. Y a todo esto con Cristina padeciendo su terrible enfermedad de Artritis Reumatoide, con las terribles limitaciones físicas que ello le provocaba, además de psíquicas, con sus dolores.., pero para ella todo eso era un segundo plano. Hoy es el día de la Caridad el día también de Corpus Christi, otro día más recuerdo a Cris porque cumplía magnificamente con la proyección de la festividad que se celebra. El próximo domingo sigo con mi abuela paterna, de nombre Caridad.
